Aceite de coco. Reconocido agente hidratante, tiene un alto contenido en ácidos grasos, ácido láurico y vitaminas E y K, por lo que también aporta nutrición y luminosidad a la piel.
Aceite de almendras dulces. Sus propiedades beneficiosas para la piel son conocidas desde la antigüedad donde se le conocía como el elixir de la belleza. Rico en Omega 3 y 6, vitaminas A, B, D y E. Se ha utilizado tradicionalmente para el cuidado de todo el cuerpo, cabello y uñas. Menos conocidos son sus cualidades como antiinflamatorio, como escudo para las inclemencias del tiempo, así como su eficacia como calmante para las pieles irritadas por su alto efecto hidratante.
Manteca de Karité. Posee un potente efecto regenerador por la presencia de vitaminas A, D, E y F que ayudan a estimular la creación endógena de colágeno. Como el aceite de almendras dulces, tiene propiedades antiinflamatorias y actúa como escudo de las inclemencias del tiempo, pero también protege la piel de los daños solares por su alto contenido en vitaminas E y F.
Alcohol fenetílico. Normalmente es utilizado como perfume y conservante natural, pero otra de sus cualidades menos conocida es su acción antimicrobiana.
Extracto de proteína de trigo. Además de aportar nutrición e hidratación estimulando la creación endógena de colágeno, ayuda a que la piel se mantenga limpia.
XYLITYL SESQUICAPRYLATE. Derivado de azúcar de Arce y del ácido caprílico tiene una potente acción antimicrobiana. El azúcar de Arce, además de sus propiedades antisépticas, es un reconocido agente hidratante. En cuanto al ácido caprílico, presente en distintas leches animales como vegetales (el aceite de coco, por ejemplo), posee reconocidas propiedades antimicrobianas y antifúngicas. La conjunción de estos dos ingredientes crea uno de los principios activos con acción antimicrobiana eficaz.
Aceite de soja. Posee un alto contenido en vitaminas A, B6, B12 y K, calcio, magnesio y potasio. Tiene propiedades antioxidantes, hidratantes y reafirmantes ya que actúa estimulando la creación endógena de colágeno y elastina ayudando en el proceso de regeneración celular.
Alcohol de ácido caprílico, cetílico y otros orígenes vegetales. Estos alcoholes al contrario que el alcohol etílico, aportan y conservan la hidratación de la piel evitando la irritación. Tienen una alta acción antimicrobiana.
